El edil de Seguridad Ciudadana, Carlos Beltrán, ha realizado una valoración de las actuaciones llevadas a cabo el pasado viernes por los fuertes vientos que provocaron diversos incidentes por toda la ciudad para los que no ha habido que lamentar daños personales.
El pasado viernes 21 de marzo la ciudad de Villena registró fuertes rachas de viento, especialmente en la mañana, las cuales alcanzaron los 87 kilómetros/hora. Debido al fuerte viento fueron muchas las intervenciones que desde la brigada de Medio Ambiente y la Policía Local tuvieron que asistir por la caída de varios árboles de gran tamaño, así como por desprendimientos parciales de cornisas y terrazas.
Por los hechos acontecidos, Beltrán ha querido transmitir públicamente su queja ante el Centro de Atención de Emergencias del 112 ya que en ningún momento se comunicaron tales previsiones a las autoridades locales. “Nadie avisó de este episodio de fuertes vientos y tuvimos que improvisar diferentes actuaciones a lo largo de la jornada”.
En la calle Ferriz se desplomó un pino de gran tamaño del jardín del asilo a primera hora de la mañana por lo cual se tuvo que desviar el tráfico rodado y peatonal de esa calle. La valla del recinto quedó gravemente dañada aunque no hubo que lamentar ninguna víctima. El cuerpo de Bomberos y la brigada de Jardinería tuvieron que intervenir para talar y trasladar el árbol de la calzada pública.
En la Plaza de Santa María cayó un chopo monumental y varios pasamanos metálicos junto a la escalera de acceso a la plaza, los cuales fueron retirados ante el intento de algunos vecinos de llevárselos. Además un macetero cayó sobre un vehículo estacionado en la Calle Ferriz y se detectaron desprendimientos parciales en cornisas de las calles: Rulda y Óscar Esplá.
Dos vallas se cayeron en el Boulevard Ambrosio Cotes así como en la Avenida de Alicante y hubo riesgo de desprendimiento de un toldo particular en la Calle Sancho Medina. Los centros educativos tampoco se libraron del mal tiempo y el IES Hermanos Amorós y el CP Ruperto Chapí, suspendieron sus actividades al aire libre por el desprendimiento de ramas de gran tamaño en algunos de los árboles en su recinto.
“El viernes hubo un riesgo por fuertes vientos que debíamos haber conocido a través del Centro de Emergencias ya que con menos de lo sucedido, en otras ocasiones se ha detectado la alerta naranja por fuertes vientos en la zona y el Ayuntamiento de Villena ha podido decretar la supresión de las clases para garantizar la seguridad del alumnado, profesorado y personal de los centros” ha concluido Beltrán.