El Ayuntamiento de Villena ha completado el ciclo de actuaciones de otoño e invierno para prevenir la aparición de la procesionaria, una oruga de carácter endémico en las zonas de pinada del término municipal de Villena. La empresa adjudicataria, Lokímica, ha aplicado tratamientos en los periodos de octubre y enero, con el objetivo de atacar durante el proceso de generación de larvas y aparición de las crisálidas.
El edil de Medio Ambiente, Francisco Iniesta, ha destacado que es en estas etapas, otoño e invierno, cuando más efectivas son las tareas de prevención y donde se ha actuado de dos maneras. De una parte, con un cañón pulverizador transportado sobre un vehículo que permite alcances de entre 30 a 40 metros, para tratar árboles de gran envergadura. Otro de los sistemas se denomina tratamiento por endoterapia, que consiste en realizar una hendidura en el tronco del árbol a modo de trampa donde se aplica el tratamiento contra la oruga.
En las acciones preventivas se ha actuado en las pinadas del Barrio San Francisco y Polideportivo, Motor Antiguo de agua potable, puente de la autovía en la carretera de Biar, Paraje Las Cruces, junto deposito antiguo en C/ San Pedro, pinada Galbis y junto CEIP Joaquín Mª López, Cementerio Municipal, Vial ecológico y Taller de Empleo San Bartolomé, Las Virtudes y detrás del santuario, la pinada de la zona del Castillo, rotonda de la carretera de Caudete, CEIP Ruperto Chapí, pedanía de La Encina, y en el E.I. Barrio San Francisco. Durante enero se volvió a realizar aplicación preventiva donde se detectó la presencia de la procesionaria, y se vigiló todos y cada uno de los puntos más sensibles de propagación.