1.- Fase de Ganancia
Al principio puede parecer fácil ganar, hay un falso pensamiento: “La suerte del principiante”, que puede llevar a pensar que hay una alta probabilidad de seguir ganando. Aparece, por tanto, una falsa sensación de control, se llegan a sobreestimar las habilidades e incluso los conocimientos sobre el juego o el deporte. La acción de jugar se asocia también a momentos positivos porque el hecho de quedar con los amigos en el salón de juego después de clase, o bien antes de salir de marcha, hace que se vivan situaciones agradables y divertidas con los iguales y esto, sobretodo en población joven es un factor de riesgo de cara a desarrollar problemas de adicción.
Esta fase se caracteriza por comportamientos como los siguientes:
- Poder adquisitivo no acorde con lo esperable para su situación económica, suelen gastar demasiado y presumir de sus ganancias. Aparecen con ropa nueva u otros caprichos y no cuadra la manera en cómo ha podido realizar estas nuevas adquisiciones.
- Hay veces que hablan abiertamente del juego; webs relacionadas, foros en los que consultan y comparten experiencias de juego, comentan estrategias, resultados, ganancias, etc.
- Aumenta su interés y nerviosismo ante los eventos deportivos en los que apuestan y consultan constantemente los resultados. Si el juego es presencial, incluso pueden animar a otros para que les acompañen, prueben suerte o sigan sus indicaciones.
2.- Fase de Pérdida
Justo por lo que ocurre en la primera fase de “éxito” y “ganancia”, empiezan a aumentar las cantidades para jugar y la frecuencia. Gastan más y se arriesgan más, por lo que las pérdidas son mayores.
Comportamientos que pueden aparecer en esta fase:
- Pasan mucho tiempo en casa con dispositivos móviles.
- Ya no hablan tanto de sus habilidades con el juego.
- El juego y todo lo relacionado con él van ocupando cada vez más espacio en su vida: No dedican tiempo suficiente a sus obligaciones, faltan o llegan tarde a clase o al trabajo, se saltan comidas, se acuestan tarde…
- Puede que pida dinero para saldar alguna deuda.
- Aparecen los primeros signos de ansiedad: Tensión, preocupación, irritabilidad, agresividad, etc.
- Puede que hagan algún intento por controlar la situación e incluso parar de jugar temporalmente.
3.- Fase de Desesperación
Aquí el juego ya ocupa prácticamente todo el espacio temporal, mental y social, es lo primero que piensa al levantarse y lo que no le deja dormir por la noche. Se agrava la situación económica, pueden aparecer los robos u otras formas de conseguir dinero. A la ansiedad de la fase anterior se le pueden sumar síntomas depresivos tales como tristeza, desinterés por actividades, aislamiento, falta de energía, baja autoestima y, en casos muy graves, incluso ideas de suicidio.
Comportamientos que se pueden observar:
- El juego y el dinero se convierten en temas tabú: Rehuyen hablar del tema.
- Prácticamente no salen de la habitación, no se relacionan prácticamente con nadie.
- Preocupación constante y recurrente en el juego, dificultando así su concentración en cualquier otra tarea que requiera de su atención.
- Reacciones desproporcionadas: Aumento de la irritabilidad, discusiones con mucha agresividad, manipulaciones frecuentes.
- Puede haber un aumento de la despreocupación por sus cosas.
- Falta dinero u objetos de valor en casa, pueden aparecer gastos injustificados con las tarjetas de crédito.
- Pueden aparecer síntomas asociados a un alto nivel de estrés, tales como pérdida o aumento de apetito, insomnio, dolores de cabeza, estómago o musculares o incluso erupciones en la piel.